¡Y que tengas el mejor día de tu vida! Eso suena como música a mis oídos, y espero que a los tuyos también. Este día es lo único que tenemos. Es lo único que puedes asir. No hay manera de echar mano al pasado, pues ya se vivió, con todo lo bueno o malo, que haya sido. Nadie te puede robar las alegrías y buenos momentos vividos. Eso es cierto, como también es cierto que los momentos duros y difíciles ya pasaron y no tienen poder sobre ti. A menos de que tu se lo otorgues.
Ahora es el mejor momento para que tengas el mejor día de tu vida. ¿Quién tiene seguro eso que llamamos “mañana”? Una cosa es tener sueños, metas, anhelos y ambiciones. Otra, vivir en una nube rodeado de “burbujas de jabón” que, al primer contacto con las realidades del mundo, explotan. No se puede vivir en un lugar, en un tiempo, que aún no existe.
Una confesión
¿Que por qué te lo digo si ya lo sabes? Porque te quiero confesar algo. Tres o cuatro días atrás, volví a experimentarlo. El sol de este verano abrasador nos acompañó con todo su furor a lo largo del día. Iban siendo las cinco de la tarde, había regresado a casa no hacía mucho rato. Bajé al patio delantero de nuestro apartamento y me senté en una de las bancas, de cara al sol que empezaba a ponerse, desplegando sus amarillos y naranjas en el inmenso azul.
Comencé a sentir, sin aviso previo, una suave brisa, que no podría llamar fresca, pero si refrescante. La sentí deliciosa. Cerré los ojos y dejé que me acariciara su tibieza. Sonreí.
¡Y mi mente me traicionó! Me elevé y me encontré deseando estar en una colina, mirando hacia una hermosa pradera viendo un ganado pastorear. Un segundo después, estaba sentado, en la misma banca de mi jardín, pero en la playa frente al mar. Y la burbuja de jabón explotó.
Estaba frente a un bello atardecer, sintiendo la suave caricia del viento, junto a mi esposa, los perros jugueteando a nuestro alrededor. Un hermoso momento presente, que no estaba valorando, ni viviendo, porque inconscientemente estaba en otro lugar. Un inexistente lugar. La explosión me hizo tomar conciencia del momento presente, de lo único que tengo, este hermoso momento presente.
La fórmula para tener el mejor día de tu vida
La invitación hoy, es a vivir conscientemente el momento presente. A vivirlo orientado hacia un sueño, para alcanzar y cumplir unas metas con objetivos específicos, si miras al pasado tenlo solo como referente, pero viviendo hoy a plenitud el mejor día de tu vida.
Es así de sencillo. Este respiro que tomas ahora, lo que tus ojos contemplan en este instante, los sonidos de los pájaros en la distancia que ahora escuchas, el frío o el calor que tu piel siente, el hambre o la saciedad que experimentas, esa es tu realidad. Es lo que nos hace decir: «estoy vivo». Eso, y la decisión de sentirnos agradecidos y felices, disfrutandolo gota a gota, segundo a segundo ó amargados y tristes por lo que fue y tuvimos, o por lo que no tenemos todavia, es lo que hace la diferencia.
¿Qué haces cuando estás cenando con amigos o en familia? ¿En que piensas cuando la persona con quien estas reunido habla? ¿Miras sus ojos mientras lo escuchas? Cuando tomas los alimentos ¿Saboreas cada bocado? ¿Sientes cada gota de agua que cae sobre tu piel cuando te duchas? ¿percibes y disfrutas el olor del jabón? ¿Saludas a las personas con quien te topas? ¿Escuchas los sonidos que rodean? ¿Te apercibes del canto de las aves, de la alegría de los niños, de los ruidos de la cotidianidad? ¿Percibes la belleza a tu alrededor? A todo eso se le llama vida.
Tu decides
!Hoy es el día perfecto para tener el mejor día de tu vida! Solo la decisión consciente de disfrutar, de vivir, de experimentar cada cosa, cada emoción, cada experiencia te va a permitir hacer de cada día una hermosa perla. Poco a poco, día a día, irás teniendo una sucesion de días hechos a tu medida. Irás armando una cadena, un collar de hermosas perlas de días que han sido los mejor vividos, y que en consecuencia te genereran bienestar. Lo que llamamos, una vida feliz.
Hoy es el día perfecto para tener el mejor día de tu vida, no sólo por que depende de ti, sino porque es el único que tenemos. Memento Mori
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Gracias
Gracias por tu visita Onis.
El pasado solo lo miro para agradecer. Todo lo que pasamos es un aprendizaje un aprender de la vida para agradecer en un mañana lo que hemos alcanzado….todos los días es el mejor día de mi vida con todo sus afanes pero entendiendo que mañana sera mucho mejor. Gracias Míster Jaime
Gracias Elena, por compartirlo con nosotros.
Hola Jaime,
Sabes que hemos hablado mucho sobre este tema, y te confieso, se me olvida estar presente en el hoy. Por ejemplo, después de mis caminatas diarias, la mayoría de las veces, cumplo con las millas, organizo el día en mi mente, pero no he disfrutado de ese momento.
Ese es un solo ejemplo. Gracias por recordarme vivir el presente.
Un abrazo.
Estar presente en el hoy se hace cada vez más dificil. Hay muchos objetos «brillantes» a nuestro alrededor, robandonos el disfrute del momento. A veces me rió, en ocasiones me enojo cuando me sorprendo a mi mismo queriendo saltar a lo siguiente, sin haber terminado, ni interiorizado o disfrutado el ahora.
Definitivamente tenemos que seguir hablando del tema.
Cada día es un regalo de Dios, acompañado de cada una de las personas que nos rodea, es lo más bello y hermoso que nuestro padre celestial nos permite disfruta en cada respirar.
Por algo cada día de esos que nos regala Dios se llama presente.