El conjunto de tus creencias al que llamaremos tu sistema de creencias es un mecanismo que es únicamente tuyo. Ten cuidado con lo que crees, porque eso es lo que experimentarás en tu vida. Este sistema de creencias está impulsado por tus deseos y controlado por tus pensamientos y acciones. La fuerza de tus creencias determina y mide tu éxito.
Las creencias son aquellas ideas que consideramos verdaderas y a las que damos completo crédito. Mi entorno y mi realidad mía son diferentes a los tuyos, por lo tanto, yo desarrollo un sistema de creencias que es totalmente diferente al que tu has desarrollado. Así nace y se arraiga nuestro sistema de creencias.
Ahora bien, ¿Qué es lo que deseas? A menudo la gente no tiene ni idea de que es lo que quiere; sólo saben lo que no quieren. Este es un buen momento para evaluar tus objetivos y determinar el resultado que deseas lograr. Pon tus metas por escrito y colócalas donde puedas verlas a lo largo del día. Léelos con frecuencia para mantenerlos frescos en tu mente.
“El hombre a menudo se convierte en lo que cree ser”.
Mahatma Gandhi.
4 ideas para ver tus metas cumplirse
Estas cuatro ideas que te propongo hoy no son ciencia nuclear, ni nada por el estilo. Pero no permitas que su sencillez nuble tu visión acerca de su importancia en el cumplimiento de tus objetivos. Examinalas, y practícalas, si acaso ya no lo estás haciendo.
•Se inquisitivo y curioso.
Investiga y aprende todo lo que puedas sobre cómo puedes lograr tu objetivo. Utiliza todos los recursos habidos y por haber, como libros, cursos y otras personas. Sí, gente. Habla con tantas personas que ya tienen éxito en lo que quieres lograr como te sea posible. Pregunta, pregunta y pregunta un poco más acerca de lo que hicieron para alcanzar el éxito. No limites tus contactos solo a las personas que ya conoces.
Preséntate por teléfono o correo, explica tu propósito de contactar con ellos y pide un consejo, un tip. Lo peor que te puede pasar es que te ignoren. Lo mejor que puede pasar es que se conviertan en tu mentor y te ofrezcan apoyo y aliento. Lo más probable es que recibas al menos un gran consejo de muchas de las personas con las que te pongas en contacto. Este método es el menos costoso y el más gratificante.
•Sé único.
Luego, toma las ideas que aprendas, embellécelas e idea tu propio proceso creativo. Piensa en cómo puedes acercarte a tu objetivo de una manera que nadie más lo haya hecho. Atrévete a ser diferente. No tengas miedo de correr riesgos. ¿Qué tienes que perder? Escribe una lista que muestre las peores cosas que podrían suceder y luego enumera todos los potenciales mejores resultados. Mantén siempre tu enfoque y concentración en el resultado deseado.
•Sé mejor que tu competencia.
Cuando eras niño y veías a tus hermanos mayores o amigos montando en bicicleta sin ruedas de entrenamiento, no mirabas sus rodillas y codos raspados y decías: «uyy, podría salir lastimado haciendo eso». En su lugar, rogaste probarlo por ti mismo. Con mucha práctica y a menudo dolor, poco a poco aprendiste a mantener el equilibrio. En poco tiempo estabas tratando de sobrepasar a tus amigos en velocidad o trucos de fantasía. Cuando caías, volvías y lo intentabas de nuevo con aún mayor determinación.
Desde tu primer esfuerzo, creíste en tu mente que, si volvías a intentarlo, eventualmente aprenderías a montar. ¡Apuesto a que incluso sabías en tu mente que serías el mejor del vecindario, en tu escuela, en el mundo!
•Se positivo.
. “Nunca permita que las limitaciones o inseguridades de otros limiten lo que es posible para ti”.
Hal Elrod.
Si solo ves los obstáculos frente a ti, entonces solo verás problemas. Si tienes dudas de que tu plan funcione, entonces no funcionará. Si el poder de las personas negativas ejerce influencia sobre ti, seguramente no llegarás a ser mejor de lo que ellos son. La idea es, cree en ti mismo y en lo que puedes lograr.
Cuando tu deseo de tener éxito es más fuerte que el dolor, el miedo o la frustración de fracasar, no hay vuelta atrás. Te reto a ver tus metas como lo hacías cuando eras niño, antes de haber aprendido a dudar de ti mismo y creerte ciegamente las críticas negativas.
Recuerda, todo es posible si crees, y actúas. Haz un compromiso de que no dejarás que nada ni nadie, incluido tú mismo, se interponga en tu camino para alcanzar las metas que te has propuesto.
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Una vez más, un texto concreto, que llama a la acción y bien elaborado. Gracias por enumerar tips prácticos para comenzar a caminar a ese futuro deseado. Sin duda, terminamos siendo lo que confesamos, creemos y pensamos de nosotros mismos. No es fácil resistir la presión de los incrédulos de sueños y las dificultades, pero siempre hay una fuerza mayor en Dios a la que podemos ir para seguir. Este tipo de artículos me recuerdan que no debo rendirme y volver a enfocarme en eso que anhelo. ¡No hay límites para el que cree que todo es posible!
Gracias por tu comentario Cindy. Una síntesis precisa con tu toque y aporte personal. Confiar en Dios, persistir, estar enfocados y estar seguro de que las posibilidades son infinitas son los pasos precisos y necesarios para sacar adelante tus propósitos y vivir contento y feliz con lo que haces y consigues.